También cuenta con un restaurante, situado a mano izquierda de la playa, llamado "Can Bigotis", con vistas al mar y al que se puede acceder desde la playa caminando 50 metros. A mano derecha encontramos un sendero que nos lleva hasta su playa vecina Cala Llenya, aunque el día que yo fui había un árbol caido que impedía el paso y no pude comprobar la dificultad del camino.
Sin más, aquí os pongo unas fotos y os recomiendo visitarla, ya que merece la pena.
